El tabique es la estructura anatómica dentro de la nariz que separa la nariz en el medio. El tabique es en parte hueso y, en mayor medida, cartílago. En condiciones normales, es necesario dividir la nariz en dos compartimentos iguales para que pueda respirar por igual por ambas fosas nasales. Sin embargo, en la gran mayoría de las personas, hay una desviación en el tabique que se desarrolla inherentemente o se desarrolla como resultado de los traumas experimentados en el tiempo. Estos pacientes son diagnosticados con «desviación del tabique». La operación para corregir estas curvaturas se llama operación de «septoplastia».
No todas las curvas de nariz pueden ser operadas. La cirugía de septoplastia puede ser necesaria en casos en los que la curvatura nasal se acompaña de síntomas como congestión nasal, dificultad para respirar por la nariz, ronquidos, hemorragias nasales recurrentes, infecciones frecuentes de sinusitis, secreción nasal constante o dolor de cabeza crónico.
Además del tabique, también hay estructuras anatómicas llamadas «concha» que nos hacen más fácil respirar y humedecer la nariz. A veces, estructuralmente, a veces debido a causas alérgicas, puede ocurrir crecimiento e hinchazón en estas estructuras. Esto hace que la respiración sea aún más difícil. A menudo, en operaciones de septoplastia, se pueden lograr resultados adicionales al interferir con la concha.
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En los hospitales en los que confiamos en la calidad del servicio, los especialistas realizan las pruebas y los controles necesarios después de su hospitalización, y se completan sus preparativos para la cirugía de rinoplastia.
Se le puede dar la alta tras hospitalizarle por una noche después de la cirugía de la nariz, y puede aplicar los métodos de tratamiento recomendados por su médico durante el proceso de curación.
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